La calidad y el cumplimiento de nuestras máquinas de envasado (llenadoras, taponadoras y etiquetadoras) son esenciales para garantizar un rendimiento óptimo para nuestros clientes. Con este objetivo, seguimos procedimientos de calificación para asegurar que cada instalación, operación y rendimiento cumpla con los estándares y requisitos deseados. Estas calificaciones se dividen en tres categorías principales: IQ (Calificación de Instalación), OQ (Calificación Operacional) y PQ (Calificación de Rendimiento).
1. IQ: Calificación de Instalación
En CDA, la Calificación de Instalación (IQ) es el primer paso en el proceso de validación de una llenadora, taponadora, etiquetadora o monobloque. Consiste en verificar que la instalación de la máquina se haya realizado de acuerdo con los requisitos especificados y las normas de seguridad. El objetivo de IQ es asegurar que todos los sistemas estén correctamente instalados y que las condiciones de instalación sean adecuadas para el funcionamiento eficiente de la máquina.
Objetivos de IQ:
- Verificación del cumplimiento de la instalación: Validación del alineamiento, montaje y conexiones eléctricas, neumáticas y mecánicas.
- Control de las condiciones ambientales: La máquina debe estar instalada en un entorno adecuado para su funcionamiento, considerando factores como temperatura, humedad, ventilación, etc.
- Validación de la integridad del equipo: Asegurarse de que la máquina esté en buenas condiciones de funcionamiento antes de iniciar las pruebas operacionales.
Por lo tanto, IQ es un paso crucial para garantizar que la máquina esté correctamente preparada y que la instalación física cumpla con las expectativas del cliente.
Ejemplo con la taponadora VS2000:
Al instalar la taponadora VS2000, verificamos el alineamiento de los componentes, la robustez de las conexiones neumáticas y eléctricas, y el cumplimiento del entorno de instalación. Nos aseguramos de que la máquina esté operando en un espacio donde las condiciones de temperatura, humedad y ventilación sean óptimas para un rendimiento máximo.
2. OQ: Calificación Operacional
Una vez que la instalación ha sido validada mediante IQ, entra en juego la Calificación Operacional (OQ). OQ garantiza que la máquina funcione correctamente en condiciones reales de uso. Esta etapa se centra en probar las funcionalidades básicas, los procedimientos de inicio y parada, así como evaluar la capacidad del sistema para responder a las órdenes.
Objetivos de OQ:
- Verificación de la operatividad: Pruebas de todas las funciones de la máquina para asegurarse de que responde como se espera durante los inicios, paradas y otras operaciones estándar.
- Control de alarmas y sistemas de seguridad: Los dispositivos de seguridad deben ser verificados para garantizar su funcionamiento confiable, asegurando la seguridad de los operadores y la protección del equipo.
- Validación del rendimiento en condiciones reales: Se prueba la máquina con cargas y condiciones similares a las que encontrará en producción para asegurarse de su correcto funcionamiento.
OQ es una etapa indispensable para validar que el equipo cumple con las expectativas de los operadores y puede usarse de manera segura en producción.
Ejemplo con el monobloque E-Fill:
En el caso del monobloque E-Fill, realizamos pruebas de operatividad para verificar que el sistema de llenado y taponado funcione sin problemas a plena capacidad. Por ejemplo, probamos la reacción de la máquina al inicio y parada de los procesos de llenado y taponado para asegurarnos de que todo funcione correctamente en condiciones de producción reales.
3. PQ: Calificación de Rendimiento
La Calificación de Rendimiento (PQ) es el último paso del proceso de calificación de instalaciones. Una vez que el equipo ha sido instalado y validado a nivel operativo, PQ evalúa si el equipo cumple con las expectativas de rendimiento a largo plazo. Esto incluye pruebas exhaustivas para medir la productividad, eficiencia, consumo energético, precisión y otros criterios específicos según los requisitos del cliente.
Objetivos de PQ:
- Medición de rendimiento: Pruebas para validar que la máquina cumple con las especificaciones de rendimiento acordadas, ya sea en velocidad, capacidad, consumo de energía o otros criterios técnicos.
- Evaluación de estabilidad: Asegurarse de que la máquina pueda operar de manera estable y confiable durante períodos prolongados sin fallos.
- Optimización de ajustes: PQ permite probar diferentes configuraciones y ajustes para maximizar la eficiencia del equipo en condiciones reales de producción.
PQ asegura que la máquina funcione al nivel de rendimiento previsto y que pueda soportar una producción continua sin problemas a lo largo del tiempo.
Un proceso completo para garantizar calidad y fiabilidad
Los pasos de IQ, OQ y PQ conforman un proceso completo de validación de nuestras máquinas y equipos. Gracias a estas tres calificaciones, CDA asegura que cada instalación no solo cumpla con las especificaciones iniciales, sino que también funcione de manera eficiente, segura y estable durante todo su ciclo de vida.
El cumplimiento de estos pasos garantiza un rendimiento óptimo, previene el riesgo de fallos y asegura la satisfacción del cliente al ofrecer equipos de alta calidad, confiables y adaptados a sus necesidades específicas.
No dude en ponerse en contacto con nosotros para más información.
